Viene el zambranazo
Mientras que Jesús Ortega se plantea la necesidad de reencauzar al PRD como la opción moderna para la izquierda, los ultras como Gerardo Fernández Noroña se valen del insulto y la confrontación. Al anunciar su próxima salida del partido, el inefable vocero dice que dejará atrás un lastre. Conste que él fue quien usó el término.
Porque todo indica que quienes salen ganando con tal escisión son los que apuestan por fortalecer a la democracia a través de la solidez de las instituciones.
Los perredistas incondicionales a López Obrador aún no digieren el hecho de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación haya reconocido el triunfo de Jesús Ortega en la elección de dirigente nacional del PRD.
Los obradoristas deberían tomar litros de té de tila, porque ahí les viene otra:
El Tribunal Electoral del Distrito Federal está por resolver la impugnación de la elección del PRD en la capital, que oficialmente ganó Alejandra Barrales.
Dicen los que están cerca de los magistrados que hay elementos para que el tribunal local le dé el triunfo a Jesús Zambrano.
Eso desataría ya no una guerra fría, sino de plano una guerra caliente entre tribus perredistas.
Pero bueno, habrá que esperar al fallo del tribunal, que ya está por salir.Que no se vaya Noroña
Hay un clamor entre los integrantes de la corriente Nueva Izquierda del PRD:
¡Que no se vaya Noroña!
Sí, que no se vaya a arrepentir, porque ayer amagó con dejar las filas del perredismo.
Fernández Noroña aseguró que no queda otro camino que dejar el partido.
Mmm... ¿Acaso cree el estrafalario personaje que será bien recibido en el PT y en Convergencia?
Las locuras de Noroña no son bien vistas ni siquiera por el “mesías tropical”.
Así que, si se va del PRD, le hará un favor a los chuchos, pero meterá en un aprieto a dantes y anayas.
Mientras que Jesús Ortega se plantea la necesidad de reencauzar al PRD como la opción moderna para la izquierda, los ultras como Gerardo Fernández Noroña se valen del insulto y la confrontación. Al anunciar su próxima salida del partido, el inefable vocero dice que dejará atrás un lastre. Conste que él fue quien usó el término.
Porque todo indica que quienes salen ganando con tal escisión son los que apuestan por fortalecer a la democracia a través de la solidez de las instituciones.
Los perredistas incondicionales a López Obrador aún no digieren el hecho de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación haya reconocido el triunfo de Jesús Ortega en la elección de dirigente nacional del PRD.
Los obradoristas deberían tomar litros de té de tila, porque ahí les viene otra:
El Tribunal Electoral del Distrito Federal está por resolver la impugnación de la elección del PRD en la capital, que oficialmente ganó Alejandra Barrales.
Dicen los que están cerca de los magistrados que hay elementos para que el tribunal local le dé el triunfo a Jesús Zambrano.
Eso desataría ya no una guerra fría, sino de plano una guerra caliente entre tribus perredistas.
Pero bueno, habrá que esperar al fallo del tribunal, que ya está por salir.Que no se vaya Noroña
Hay un clamor entre los integrantes de la corriente Nueva Izquierda del PRD:
¡Que no se vaya Noroña!
Sí, que no se vaya a arrepentir, porque ayer amagó con dejar las filas del perredismo.
Fernández Noroña aseguró que no queda otro camino que dejar el partido.
Mmm... ¿Acaso cree el estrafalario personaje que será bien recibido en el PT y en Convergencia?
Las locuras de Noroña no son bien vistas ni siquiera por el “mesías tropical”.
Así que, si se va del PRD, le hará un favor a los chuchos, pero meterá en un aprieto a dantes y anayas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario