Seguiremos pagando la gasolina más cara del mundo?
Seguramente sin proponérselo, el subsecretario de Ingresos de Hacienda, José Antonio Meade, confirmó ayer que la gasolina de México es la más cara del mundo. Informó que en Estados Unidos el precio de la regular, equivalente a la Magna, es de 9.98 pesos el litro, mientras que aquí cuesta 7.38; la Premium allá vale 10.59 y en nuestro país 9.21, y el diesel estadunidense se expende a 11.54 y el de Pemex a 6.58. Los datos aportados por el señor Meade son impecablemente exactos. Como pueden advertir, después de 18 flamazos ya no hay gran diferencia, excepto en el diesel, pero donde sí hay una distancia enorme es en el renglón de los salarios. En nuestra tierra han permanecido casi congelados, mientras que al otro lado de la frontera en fecha reciente hubo un aumento. Hay millones de personas registradas en el IMSS y en la economía informal sujetas a salario mínimo: mil 500 pesos mensuales. En cambio, allá el mínimo federal subió de 5.85 dólares a 6.55 la hora a partir del pasado 24 de julio. Si un empleado labora 160 horas al mes, se lleva a casa un cheque de mil 48 dólares, es decir, 11 mil 118 pesos. En otras palabras, gana siete tantos más que un mexicano. El costo de los combustibles va en dirección a igualarse. ¿Es justo que un consumidor pague lo mismo que el de otro país que gana siete veces más? Tomando en cuenta nuestro escaso poder de compra, ¿no pagamos la gasolina más cara del mundo?
La buena y la mala
El secretario de Hacienda, Agustín Carstens, nos dio ayer una noticia excelente y otra francamente mala. La primera se refiere a impuestos: no aumentarán los que existen ni se crearán otros en 2009. Es más, el proyecto de ley de ingresos que presentó al Congreso ni siquiera incluye la temible miscelánea fiscal, caja de Pandora que fue el terror de contribuyentes y contadores. El impuesto a los depósitos en dinero en efectivo está funcionando bien y el IETU sigue en zona de indefinición para los causantes que presentaron demanda de amparo, alrededor de 30 mil. La noticia pésima es que no ha terminado la temporada de los gasolinazos, no obstante que el de México es el combustible más caro del planeta. Es inconcebible que los partidos políticos, los líderes sindicales, los diputados y senadores guarden silencio frente a este proceso inquietante en que el propio gobierno crea inflación. ¿Será que primero se acordó que los gobernadores recibirían una pizcacha nada despreciable?
NOTA:NO OLVIDMEOS NUESTRO OTRO RECORD:EL SUELDO DEL QUE VIVE EN LOS PINOS ES DE LOS MÁS ALTOS DEL MUNDO...
Felipe Calderón no habrá sido la mejor opción para la Presidencia de la República -según lo dijo su compañero de partido Carlos Abascal-, sin embargo, cobra un salario superior a muchos presidentes del mundo. Desde luego, los mandatarios latinoamericanos -Nicaragua, Guatemala, Brasil, Argentina y Venezuela- son unos mal pagados junto al mexicano, cuyos ingresos no están muy lejos de los que percibe el presidente de Estados Unidos. La tabla comparativa que aparece en esta página fue elaborada por Juan Díaz, un mexicano que reside en Georgia, Estados Unidos. Realizó una minuciosa investigación en diferentes fuentes de información.
Seguramente sin proponérselo, el subsecretario de Ingresos de Hacienda, José Antonio Meade, confirmó ayer que la gasolina de México es la más cara del mundo. Informó que en Estados Unidos el precio de la regular, equivalente a la Magna, es de 9.98 pesos el litro, mientras que aquí cuesta 7.38; la Premium allá vale 10.59 y en nuestro país 9.21, y el diesel estadunidense se expende a 11.54 y el de Pemex a 6.58. Los datos aportados por el señor Meade son impecablemente exactos. Como pueden advertir, después de 18 flamazos ya no hay gran diferencia, excepto en el diesel, pero donde sí hay una distancia enorme es en el renglón de los salarios. En nuestra tierra han permanecido casi congelados, mientras que al otro lado de la frontera en fecha reciente hubo un aumento. Hay millones de personas registradas en el IMSS y en la economía informal sujetas a salario mínimo: mil 500 pesos mensuales. En cambio, allá el mínimo federal subió de 5.85 dólares a 6.55 la hora a partir del pasado 24 de julio. Si un empleado labora 160 horas al mes, se lleva a casa un cheque de mil 48 dólares, es decir, 11 mil 118 pesos. En otras palabras, gana siete tantos más que un mexicano. El costo de los combustibles va en dirección a igualarse. ¿Es justo que un consumidor pague lo mismo que el de otro país que gana siete veces más? Tomando en cuenta nuestro escaso poder de compra, ¿no pagamos la gasolina más cara del mundo?
La buena y la mala
El secretario de Hacienda, Agustín Carstens, nos dio ayer una noticia excelente y otra francamente mala. La primera se refiere a impuestos: no aumentarán los que existen ni se crearán otros en 2009. Es más, el proyecto de ley de ingresos que presentó al Congreso ni siquiera incluye la temible miscelánea fiscal, caja de Pandora que fue el terror de contribuyentes y contadores. El impuesto a los depósitos en dinero en efectivo está funcionando bien y el IETU sigue en zona de indefinición para los causantes que presentaron demanda de amparo, alrededor de 30 mil. La noticia pésima es que no ha terminado la temporada de los gasolinazos, no obstante que el de México es el combustible más caro del planeta. Es inconcebible que los partidos políticos, los líderes sindicales, los diputados y senadores guarden silencio frente a este proceso inquietante en que el propio gobierno crea inflación. ¿Será que primero se acordó que los gobernadores recibirían una pizcacha nada despreciable?
NOTA:NO OLVIDMEOS NUESTRO OTRO RECORD:EL SUELDO DEL QUE VIVE EN LOS PINOS ES DE LOS MÁS ALTOS DEL MUNDO...
Felipe Calderón no habrá sido la mejor opción para la Presidencia de la República -según lo dijo su compañero de partido Carlos Abascal-, sin embargo, cobra un salario superior a muchos presidentes del mundo. Desde luego, los mandatarios latinoamericanos -Nicaragua, Guatemala, Brasil, Argentina y Venezuela- son unos mal pagados junto al mexicano, cuyos ingresos no están muy lejos de los que percibe el presidente de Estados Unidos. La tabla comparativa que aparece en esta página fue elaborada por Juan Díaz, un mexicano que reside en Georgia, Estados Unidos. Realizó una minuciosa investigación en diferentes fuentes de información.
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