miércoles, 3 de septiembre de 2008

Utopïa.Autoritarismo presidencial‏


UtopíaEduardo Ibarra AguirreConcluyó, por fortuna, el tan faraónico como arcaico rito del Informe de Gobierno. Por desgracia comenzó otro para que las cámaras y micrófonos de la televisión duopólica y la radio oligopólica se pongan a las órdenes del titular de Ejecutivo federal para que publicite –sin preguntas que lo molesten o incomoden-- al país en el que sueña, el imaginario que ya lo hizo prisionero, y no el que padecen la inmensa mayoría de los mexicanos, incluidos por supuesto los que marcharon el sábado 30.
Es alarmante, sin mediar hipérbole, el creciente divorcio entre el México real, en el que naturalmente no todo son fracasos gubernamentales --como los conquistados en seguridad pública, empleo, alimentos, inflación y derechos humanos--, y el México real cada vez más agobiante, políticamente encrespado y socialmente en la polarización.En el tour mediático del 1 y 2 de septiembre, el de los conductores convertidos en alfombras --y para muestra baste el botón de Javier Alatorre Soria en Hechos: "Ni modo, señor presidente, pero le tengo que preguntar…"--, Felipe de Jesús Calderón Hinojosa hizo esfuerzos con poco éxito, para contener el autoritario que todos en mayor o menor medida llevamos dentro, y que la cultura, los valores y la educación permiten subordinarlo a las conductas y decisiones que adopta uno, y no se diga alguien que despacha en Los Pinos y que con nuestros impuestos es cuidado por 13 mil 500 integrantes del Estado Mayor Presidencial.
A quienes afirman –y vaya que son muchos-- que no terminará su gobierno, responde sin cuidar las formas republicanas: "¿Que no termino? ¡Me tiene sin cuidado!", dijo a Joaquín López-Dóriga Velandia el hombre que jura gobernar para todos los mexicanos. Y asegura que cumplirá su mandato hasta el 1 de diciembre de 2012, ya que sus críticos "son los mismos que dijeron que yo no tomaría posesión o que yo no ganaría las elecciones".
Tiene razón. Acaso sus críticos subestimaron su capacidad para subordinarse a los 39 dueños de México que tienen secuestrado el rumbo de la nación. Para tejer alianzas con la eficiente operadora electoral Elba Esther Gordillo Morales, secuestradora de buena parte de la educación pública y los dineros y derechos de los trabajadores de la educación. Para negociar apoyos mediáticos con Emilio Azcárraga Jean y Ricardo Benjamín Salinas Pliego a cambio de bloquear la reforma estructural que acabaría con el secuestro de la información y de los órganos públicos encargados de regular a la mediocracia electrónica.
En este país de secuestros a la luz del día y con la anuencia y complacencia de prácticamente todas las autoridades, de los tres órdenes de gobierno y los tres poderes de la Unión, para más de la tercera parte de los ciudadanos la soberanía popular fue secuestrada el 2 de julio de 2006.
Cierto o falso, es la percepción de una ancha franja de mexicanos que no puede ser tratada con el desdén autoritario del abogado y economista. "No voy a darles la importancia que no se merecen", dijo a Carlos Puig Soberón, después de darse baños de demócrata, ignorando que elogio en boca propia es vituperio, y tras definir, una y otra vez, a su principal adversario político y, por lo que se escucha causante de sus enojos e irritabilidades, como autoritario.
Hasta al sicólogo pretende hacerle el michoacano de Morelia que una vez se disfrazó de gastroenterólogo, apoyado por José Luis Soberanes Fernández, para tergiversar el asesinato --por violación a cargo elementos del Ejército Mexicano-- de Ernestina Ascencio Rosario, la indígena náhualt de 73 años.
"Es un capricho", diagnosticó Calderón Hinojosa para descalificar el derecho del Movimiento Nacional en Defensa del Petróleo a festejar el 15 de septiembre en el Zócalo. "Es una fiesta de todos los mexicanos", argumenta. Sólo que no son pocos los que no sienten representados por él.
Acuse de recibo
La anterior Utopía, Tres llamadas, suscitó comentarios. Dice el acreditado periodista Virgilio Dante Caballero Pedraza: "De veras gracias por compartirnos algo de tu corazón de hombre de bien, de emociones bellas; así fue y será también Gilberto. No tengo resistencia alguna a decir que lo que nos une es el amor a todos nuestros hermanos, que nuestra patria es la humanidad. Sigo tus letras reflexivas, valerosas, como ratos de luz."… La colega María Concepción Salcedo Meza abunda: "Hasta hoy pude leer tu artículo, cuyas expresiones de cariño y reconocimiento al compañero Gilberto Rincón Gallardo me impresionaron. Lamento profundamente lo ocurrido por ser una pérdida para las causas democráticas y contra la discriminación. Te abrazo solidariamente desde Zamora, Michoacán"... Teresa Mójica Morga y Angelina Rivera, directora y subdirectora de publicidad de la Cámara de Diputados, bajo la presidencia de Ruth Zavaleta Salgado, expidieron con fecha 29 de agosto de 2008, la orden de inserción 3974 de la Coordinación de Comunicación Social. Resultó apócrifa. Se sumaron, así, al gobierno federal en el boicot publicitario contra Forum.
forum@forumenlinea.comhttp://www.forumenlinea.com/

PRETENDE CALDERON ENGAÑAR CON CIFRAS FALSAS






SOBRE EL EMPLEO, ES INSUFICIENTE Y MAL PAGADO
México, D.F., 2 de septiembre de 2008
El Segundo Informe de Gobierno de Felipe Calderón Hinojosa en materia de empleo ofrece, en primer lugar, cifras falsas sobre el presunto incremento en la generación de puestos de trabajo; en segundo lugar, oculta que los bajos salarios y precariedad de los que han sido creados y, por último, lo que resalta es una política de Estado en materia laboral que deja a los trabajadores en condiciones de total indefensión y sometidos a la voracidad de los empresarios.
Es bien sabido que el gobierno federal no tiene una política de promoción real de empleos formales y de calidad; además, producto de la contracción de la economía mexicana que comenzó en 2007, no se ha creado el millón 200 mil empleos anuales que requiere México.
De acuerdo con esa perspectiva, para julio de 2008 debieron crearse un millón 800 mil empleos nuevos y de calidad pero, según el informe presidencial, apenas se han generado 800 mil, por lo que hay un déficit de un millón de puestos de trabajo, sólo en el primero semestre de este año.
Peor aún, la cantidad de empleos que reporta la Presidencia de la República no corresponde a la realidad. Según datos del IMSS y del INEGI, en diciembre de 2006 —inicio de la administración calderonista—, había 13 millones 981 mil trabajadores y para junio de 2008, los datos arrojan 14 millones 472 mil. Por tanto, si en cerca de dos años se crearon 491 mil puestos de trabajo, es poco creíble que en un mes se hubieran creado 309 mil más, suficientes para llegar a los 800 mil que presume mentirosamente Calderón.
En refuerzo de lo anterior es conveniente recordar que para 2008 el Banco de México redujo a 350 mil la expectativa de los empleos que se crearán, lo cual significa una caída de 150 mil empleos, tomando como referencia los pronósticos de principios de año, lo cual demuestra la poca solidez de los datos proporcionados por la Presidencia de la República.
Por otro lado, es importante poner énfasis en que los empleos que se han creado en estos últimos años son totalmente precarios, es decir, en su mayoría son eventuales, con bajos salarios, carentes de seguridad social, sin estabilidad ni permanencia alguna, terciarizados y sin que los trabajadores puedan ejercer su derecho a la sindicalización.
La precariedad de esos empleos desmiente las cifras alegres del gobierno federal. No se trata solamente de hacerle pensar a la opinión pública que se cumple creando miles de empleos —de por sí insuficientes—, sino de generar empleos dignos para los mexicanos, con todos los derechos que les otorga la Constitución y no con la modalidad cada vez más extendida de la terciarización, que genera trabajadores semiesclavos, sin ningún derecho a prestaciones y con contratos de tres meses.
Asimismo, el informe de Calderón omite deliberadamente las acciones que su gobierno, en particular el secretario del Trabajo y Previsión Social, Javier Lozano, ha realizado para servir de manera eficiente a los empresarios y a los poderosos en detrimento de los trabajadores.
Intervención gubernamental en los sindicatos, autoridades que invariablmente fallan en contra de los trabajadores y sus organizaciones; mantenimiento de privilegios para los caciques y mafias sindicales; recuentos amañados con la complacencia de la Junta de Conciliación y Arbitraje para evitar la organización auténtica de los trabajadores, son los elementos verdaderos de la política laboral calderonista.
Calderón presume también una serie de acciones en apoyo a la economía familiar. Falso también. Las pretendidas acciones para apoyar a la economía familiar no son más que medidas publicitarias que esconden la realidad de una inflación galopante que comenzó con su sexenio y que no ha sido capaz de controlar; en todo caso, que tampoco le interesa controlar mientras mantenga, como lo reconoce el propio informe, las variables macroeconómicas aunque la gente se esté sumergiendo en la pobreza y más de la mitad de la población en la más absoluta miseria.
Para la mayoría de las familias mexicanas el impacto del incremento de precios ha sido brutal, los principales alimentos de la canasta básica han incrementados sus costos en porcentajes que van de 10 a 30 por ciento.
Alimentos como la tortilla, el huevo, la leche, el aceite, entre otros, han visto subir sus precios de una manera desorbitada. Sólo en agosto la gasolina incrementó su precio en dos ocasiones, lo cual desata una mayor inflación. El gobierno federal irresponsablemente acusa de todo a la situación internacional, cuando ha sido él el causante de esta crisis al imponer con rigidez una política neoliberal.
Como se ha podido constatar con las alzas irrefrenables, los acuerdos con las principales cadenas comerciales para controlar el precio de los alimentos no tuvieron ningún efecto, además de que no se incluyeron alimentos básicos. Pese a las mentiras de Calderón se avizora un repunte dramático de la inflación.

No hay comentarios: